Beeper.


Beeper.

       Acabo de leer de fuente Notimex una noticia que tiene como título: Radiolocalizadores japoneses morirán esta noche. Así lo anunció la única empresa que seguía prestando ese servicio: Tokio Telemessage Inc. Nunca pensé que aún se siguieran utilizando hasta leer esa noticia.

Radiolocalizador, Mensáfono o los útiles y famosos Beeper, me refiero a la misma herramienta que hace unos años fue muy utilizada para localizar personas y dejarles un mensaje; para las nuevas generaciones, les comentó que el tema es de antes que surgieran los teléfonos celulares.

Y comienzo por comentarles que antes que existieran los teléfonos celulares, la mayoría de las personas nos sabíamos de memoria los números telefónicos de amigos y familiares, para los números no tan comunes de marcar hay quienes utilizábamos una agenda de bolsillo, que era una especie de libretita y sus hojas estaban divididas por las letras del abecedario para mayor facilidad de registrar y ubicar los números de quienes deseábamos marcar.

Inclusive era menester traer moneditas de 20 centavos para realizar llamadas de teléfonos públicos, las cuales eran ilimitadas; ya que con una monedita podías hablar todo el tiempo que quisieras.

¿Pero cómo funcionaba el Beeper?

Muy sencillo, quien tenía un beeper daba el número de localización a sus familiares, amigos o a sus clientes, entonces para localizar a una persona con radiolocalizador, solo había que marcar a un número donde te contestaba una operadora quien procesaba el mensaje: Ejemplo: “Repórtate a tu casa urgente”. Entonces, a ese aparatito llegaba el mensaje y si andabas en la calle sin acceso a un teléfono fijo de casa u oficina pues es por ello la necesidad de traer siempre moneditas de 20 centavos, de esa forma te comunicabas con quien te estaba buscando lo más pronto posible.

Considero que en su tiempo era algo así como enviar señales de humo modernas, pero hoy en día esa herramienta ha llegado a un estado lúgubre de utilidad, señal que la ciencia y la tecnología va avanzando de tal forma que me quedo pensando ¿Qué utilizaremos o utilizaran las personas para comunicarse en años venideros?

Se los dejo de tarea.-

Francisco Castro.

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